Las conductas de riesgo podían hacerse más seguras; el sexo con condón e inyectarse con una aguja limpia reducían la posibilidad de que una persona con sida lo trasmitiera a su pareja. Este cartel ofrece ambas soluciones, además de apelar al sentido de responsabilidad del lector para proteger a los demás al tomar la decisión de cuidarse a sí mismo.