La persona que aparece en este anuncio intenta modelar alternativas a las excusas de los hombres para no usar condón al tener sexo con otros hombres. Anuncia que es positivo de VIH con la esperanza de ayudar a otros hombres a prevenir el contagio.
A mediados de la década de 1990, los proveedores de servicios de sida reconocieron la necesidad de ofrecer atención y tratamiento para las personas positivas de VIH al tiempo que se promovía el sexo seguro para prevenir su propagación.